Hoy por la tarde cuando mi día había empezado, pues mal, como los últimos días... estrés por muchas cosas, en fin, he tenido mis semanas saturadas de cosas que hacer, más que nada de la escuela, y hoy no fue la excepción. Me encontraba caminando a la cafetería después de terminar una de mis clases, que me puso de peor humor porque no entendí lo que el profesor había encargado, tenía muchas cosas en la mente, nada importante, pero mi mente así lo percibía, y todo lo de la escuela me parecía que era exagerando pero así tenía mis pensamientos.
Entré a la cafetería y al fijarme, ya no tenía dinero, y maldije entre labios, porque tenía mucha hambre y eso me puso aún más molesta, pero, sin asegurar nada, me atreví, y le dije al encargado que si me fiaba una comida, ya que diario hacen una comida diferente, la de hoy estuvo, pues rica, pero cuando la pedí me fui a una mesa y me puse a estudiar para mi examen de mi última hora, que era lo que más me tenía preocupada y de más, estresada. Repasaba y repasaba lo que tenia que aprenderme, ya que era un examen oral de entre cincuenta temas, y no sabía que me preguntarían. En lo que comía, me di cuenta, que no hay mucha gente que tiene la suerte como muchos que están como yo, quejándose, estresándose por cosas que precisamente tampoco tienen, como estudios, o comida del día de la cafetería de una universidad privada, aunque sea comida que salí debiendo porque no tuve para pagarla, pude calmar mi hambre con una comida grande, rica y variada el día de hoy, y habiendo tanta gente, estudiantes como yo, que no han tenido ni para eso, no hay quien les dé una comida aunque la paguen la día siguiente, o la oportunidad de estar estudiando, sea donde sea escuela pública, privada, abierta; o tienen que batallar para poder seguir con su día gracias a problemas equis. Me seguí sintiendo de la mierda, sí, aún así seguía estresada, odiando el puto día, con ganas de llorar a cada rato por tanto estrés y sueño acumulado por desvelos de tareas, etc., pero, soy ''afortunada''. Cuando llegué a mi casa más tarde, ya con un peso menos de encima, supuestamente, creo duré bastante en la regadera, saliendo, aún teniendo mucha, mucha tarea y cosas que hacer me tumbé en la cama con el cabello mojado y me quedé dormida. Desperté, ya había oscurecido, y aún me siento cansada, agotada, y enfadada. Pero, me siento, un poco mejor, de lo que me sentía ayer, for instance, so... Sé que me va a ir bien, todo va a mejorar, porque descubrí que sí soy afortunada. Aunque no por eso dejaré de tener sentimientos y usarlos para seguir odiando al mundo entero.
A.
