Personal Passiones

Personal Passiones

miércoles, 25 de marzo de 2020

El fiel y maldito compañero.

Ya estamos a miércoles, el aire topa con la ventana y la noche transcurre normal. Se siente surreal, el tiempo va mas lento, y la vista se hace tridimensional, me siento drogada, qué quisiera yo que fuera por drogas de verdad, algún alucinógeno que me haga parpadear, sonreír, palpitar por amor, tranquilidad, y no por ansiedad, y pánico. 
Fuera de mí, el mundo sigue girando, la noche se hace día, y el día se hace noche, las horas pasas, el aire corre, el virus conduce esta maldita pandemia que no me deja ni correr a algún lugar donde pueda refugiarme. Sólo me quedas tú, otra... maldita... vez. De nuevo tú, hacía meses no te veía, yo he estado bien, hasta que esto pasó y arribaste en mí. Sabes, estaba sonriendo genuinamente, estaba sintiendo la luz del sol en la cara y pasé una bella navidad pasada, ya casi ni me acordaba de ti. Me sentía contenta, estaba sintiéndome yo después de mucho. ¿Por qué tienes que venir cuando algo sale mal? Pareces un maldito boomerang. Quiero ser más fuerte y no me dejas. Siempre me noqueas con tu puño y de ahí ya no me puedo parar. Me tumbas y ya no quiero hacer lo que me gusta hacer. Y fíjate, dolor, que ahorita ando bloqueada, te estoy sintiendo tanto dentro de mí que empecé pero ya no puedo llorar, me siento muy fría en la piel y me saturaste de más amigos tuyos, sentimientos encontrados se les dicen en el barrio. Quiero desahogarme. No me vas a dejar ¿verdad? Cuánto tiempo te vas a quedar esta vez... ¿? Te divierto, no lo dudo. Por algo estás en mí mucho tiempo. Y malnacido, llegaste precisamente cuando no puedo abrazar a nadie ni de consuelo.

Quiero llegar viva al fin de la pandemia. Déjame por favor llorar un poco, necesito llorar. Necesito sentir algo cálido, positivo. Porfavor para mañana si puedes, vete.

Porfavor... vete.



No hay comentarios. :

Publicar un comentario