Tal parece que hablar de la tristeza es lo que me gusta. Cuando tienes ese sentimiento de que te sientes un poco mal, triste, y dices, si esto se pone así, no sé como haré para ocultar las lágrimas. Pero ocurre lo contrario y llega ese golpe a tu pecho, golpe tal vez de un desamor, traición, decepción, u ocasionado por equis razón, que hace que tu interior se sintiera como si explotara y se inundara de un batido enorme de emociones feas; coraje, dolor, tristeza, impotencia, desaliento, tal vez hasta ira y miedo. No sientes las manos, es como cuando te llenas de miedo, pánico y la sangre se te baja al piso, no sientes nada, solo un mareo fuerte por la impresión enorme de lo que acaba de pasar.Y es ahí cuando sabes que llegaste al punto casi máximo de dolor intenso emocional, y es tanto lo que sientes, que simplemente te bloquea. Te bloquea y te tumba, no sabes como actuar, qué hacer o qué responder, algunas veces solo respiras fuerte, tu cara se transforma en esa mueca sin nada, neutral, vacía, pero al mismo tiempo que transmite todo, irónicamente. Y lo peor ocurre, no te puedes desahogar, no sabes como, y las lágrimas trabadas.
Simplemente no salen.
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